Se terminan las vacaciones de Navidad: las copiosas, muy abundantes y contundentes comidas y cenas repletas de excesos como el marisco y todo tipo de dulces como el turrón o los polvorones, pasando por los bombones y terminando con el Roscón de Reyes, por muy light que puedan ser los trozos de fruta que lo adornan. Y después de las fiestas llegan los remordimientos al comprobar sobre la báscula hasta qué punto nos hemos excedido, las prisas por perder los kilos ganados de más que hemos acumulado y surge el objetivo de adelgazar después de Navidad.
Para eliminar los centímetros extras a lo ancho, y reducir los kilos y las calorías de una manera sana y equilibrada hasta recuperar nuestra talla habitual, te aconsejamos una completa dieta depurativa acompañada por una rutina de ejercicios que, aunque sean muy fáciles de seguir, es necesario perdurar y ser constante hasta lograr el objetivo que se persigue: adelgazar y recuperar la figura anterior a las fiestas navideñas.
- El primer paso lo estás dando ya: convencerte y proponerte cambiar tu estilo de vida. Tener muy claro que las cosas no se consiguen por arte de magia, de un día para otro. Es necesaria la constancia y el convencimiento de estar haciendo las cosas bien, para mejorar.
- No escoger el camino más corto y fácil. Rechazar las dietas milagro y las falsas promesas que aseguran recuperar tu figura en apenas una semana de esfuerzo. Lo primero es tu salud, y para ello debes escoger una dieta depurativa equilibrada, variadas y sana.
- Junto a la dieta escogida, realizar ejercicio físico. Siempre con moderación y constancia, practicar una rutina física diariamente, y no darte una paliza haciendo un día un cotraproducente sobreesfuerzo físico para después, por los dolores y falta de preparación, no realizar ninguna rutina que acompañe a la dieta durante días. La combinación dieta y ejercicio físico siempre es la fórmula ganadora y más satisfactoria, con muchísima diferencia y de manera segura.
- Modera el consumo de sal. La puedes substutir por otros condimentos. Por ejemplo, son muchos quienes la sustituyen por limón u otros.
- Beber mucha agua. Todos lo recomiendan. Por lo menos, entre un litro y medio y dos litros de agua al día. El agua natural siempre es buena, y además te ayuda a combatir posibles resfriados muy habituales durante esta época del año.
En caso de querer profundizar, o el necesitar mayor urgencia y contundencia en las propuestas a seguir, te recomendamos consultar con un nutricionista o un dietista, para profundizar todavía más y ser guiado por un profesional especialista en la materia.